Inesuchy
Agobio, estrés, ver como la gente empieza a clase, normalmente estaría en ese lugar, nerviosa por tener que empezar de nuevo a clase con mis compañeros desde hace casi 5 años... pero no es así. Este año toca un cambio mucho mayor, cambiar de universidad, de ciudad, de país, durante un año... La mayoría dicen que esa experiencia es la mejor, que conoces gente, subes considerablemente el expediente, y ante todo y sobre es algo inolvidable, pero siempre hay un pequeño grupo de personas que te dicen que no es tan maravilloso, y no puedes evitar pensar si tú serás una de esas personas que lo pasa mal durante un año. Todavía quedan ocho días, pero probablemente sea lo peor. Se que el día antes voy a llorar por separarme de aquellos a los que quiero, por no poder verlos en unos meses, o más que verlos, ya que con las nuevas tecnologías es fácil que nos veamos casi a diario, estar con ellos, abrazarlos cuando tengan un mal día o reír con ellos cuando tengan uno bueno, pero, cuando todavía quedan 8 días, lo que pasa por la cabeza no es eso, si no la cantidad de cosas que hay que hacer antes de irse. No cabe todo en la maleta, es materialmente imposible meter todas las cosas que quieres recordar en una maleta para que te acompañen allá donde vayas. Muchas de las cosas más preciadas que tengo se tendrán que quedar aquí, en Avilés, metidas en una caja, esperando a que a mi vuelta las saque para ver de nuevo la luz del sol. ¿Será difícil este año? ¿todo irá bien? ¿seré capaz de estar tanto tiempo sin mirar cara a cara a todas las personas a las que quiero de verdad? Son preguntas que espero poder ir respondiendo a lo largo de este año. De todas formas, y de esto estoy completamente segura, tanto si las cosas van mal, como si las cosas van bien, esta experiencia servirá para crecer como persona, para darme cuenta de las miles de cosas de las que soy capaz y aprender a resolver mis problemas sola. En este viaje muchas personas entrarán en mi vida, muchas relaciones se apagarán (probablemente porque no sean lo suficientemente fuertes como para aguantar tanto tiempo sin verse) pero tengo claro que otras se afianzarán, tan vez me sorprenda, y las relaciones que creo perdidas sean las más fuertes de todas y las que considero más fuertes no soporten ni tan siquiera un mes sin verse, pero sólo el tiempo puede resolver esas preguntas... Como se suele decir, tiempo al tiempo, que es sabio y acaba poniendo a cada uno en el lugar que le corresponde en nuestras vidas, ya sea como un pilar o completamente desvanecido.